El Barcelona tenía una idea de apertura muy clara y tomó la iniciativa en el juego.

 


El Barcelona tenía una idea de apertura muy clara y tomó la iniciativa en el juego. El Real Madrid, por su parte, intentó hacer daño atacando en vertical, aunque los de Torril no remataron las porterías contrarias con la consistencia tan característica.


Claudia Pina es la pesadilla del hombre blanco responsable de todos los peligros que ha traído Barcelona. Sin embargo, en los primeros minutos, ambos planes llegaron tímidos al área y no tuvieron clara ventaja.


fuerte golpe en la puerta

El Barcelona empezaba a ganar más confianza sobre el verde y Krnogorcevic estuvo cerca de marcar el primer gol de los culés en un centro de Patrigiaro. Segundos después, Claudia Pina se encargó de marcar el primer gol del partido tras encajar un remate imposible para Misa.


Al Real Madrid le costó ganar peso en los partidos, y esa incomodidad significó que tuviera poca o ninguna rotación en ataque. Los de Toril, aunque mantenían una sólida defensa, llegaban al descanso con algunas dudas.


extraño rescate

La segunda parte empezó con más contención, con el Real Madrid enchufando y presionando a los culé. Caroline Weir, que vio el bote de esencia, anotó un soberbio tiro libre desde el borde del área para igualar.


El Barcelona buscaba una respuesta y Geyse Ferreira estuvo a punto de marcar el segundo con un disparo cruzado. Sin embargo, el partido de las jugadoras del Real Madrid dio un vuelco cuando Irene Paredes fue expulsada tras recibir una doble tarjeta amarilla en el minuto 59.


El juego se interrumpió por completo y ambos lados comenzaron a atacar. Aunque tuvieron oportunidades de ganar el juego, ambos equipos no pudieron anotar contra sus oponentes. De esta forma, el partido entrará en la prórroga.


esta mas cerca que nunca

La intensidad bajó un punto cuando el cansancio comenzó a debilitar a ambas escuadras. El Real Madrid anotó un punto extra en la prórroga y comenzó a sondear los goles de los oponentes con más frecuencia.


Las ocasiones del Madrid se hicieron cada vez más peligrosas, con Weir marcando tras recibir un pase de la muerte de Slawa, solo para que lo anularan por un fuera de juego que nunca sucedió. Athena también tuvo una oportunidad después de recibir el balón fuera del campo poco después, pero su disparo no pasó por el poste derecho de Sandra Panios.


Pese al ímpetu de los pupilos de Toril, sería mala suerte para los blancos que el colegiado sancionara a Svava con un penalti "tonto". Mariona quedó invicta en la carrera de once metros y superó al equipo de Girardes.


El Real Madrid vio desaparecer el Clásico más cerca que nunca.

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